Hay pocas cosas más típicas y que representen mejor la imagen de Holanda que unos buenos zuecos (klompen). Es por ello que, en este caso, una visita a un taller artesanal más que una actividad turística es una mirada a la historia de un país. Hablamos de Scherjon´s Klompenmakerij y su museo de los zuecos.
La revolución industrial introdujo el empleo de maquinaria en los procesos productivos. De la noche a la mañana la producción en serie pasó de ser semi-artesanal a algo automatizado. El progreso y la tecnología han mejorado la eficiencia a base de retirar mano de obra y sustituirla por máquinas. No tengo nada en contra de la producción masiva, es buena porque abarata el producto pero quizá nos hace perder la perspectiva de que aún hay gente que fabrica cosas de forma artesanal y que ponen algo que no hacen las máquinas, dedicación y atención por los detalles.
En la localidad de Noardburgum se encuentra uno de estos talleres que aún fabrican y venden zuecos artesanales. Es necesario entender que aquí no cuentan con modernas máquinas CNC que sacan 40 zuecos por minuto sino que los fabrican uno a uno.
Nada más llegar nos saludan un par de zuecos pintados con la decoración distintiva de la marca y al fondo vemos la materia prima, unos enormes troncos. Pasamos directamente al taller donde vemos como se hace un par de zuecos paso a paso.

Vemos que las máquinas son muy básicas, modelan los bloques de madera en bruto siguiendo las formas de un molde. Nada está computerizado. El proceso comienza con dos bloques en bruto a los que se les da la forma externa del zueco.


El siguiente paso consiste en tallas la cavidad donde va el pie, primero en bruto y en otra máquina con un acabado más fino.

Por último se corta el apéndice frontal y, según el modelo, se le hacen las ranuras para unas tiras transversales. Tras afinar el acabado externo y un secado se pasa a la pintura.

Como decíamos más arriba la decoración externa del zueco representa la imagen de la marca, es única y distintiva de su origen, y se hace a mano.

Una vez visto el proceso de fabricación pasamos al museo donde tienen una muestra muy importante de zuecos de todas partes del mundo. Es interesante ver las diferentes formas y diseños según la región de que se trate. Si se nos pasa el tiempo y nos entra hambre podemos tomar algo en la cafetería anexa al museo.

Y finalmente podemos completar la visita comprando un buen recuerdo en la tienda.

El zueco es un símbolo en este país y en Scherjon´s Klompenmakerij lo sienten con orgullo. Fabrican un producto de calidad y la atención es exquisita valores que en la época del low cost que vivimos se está perdiendo.
Scherjon´s Klompen. 100% Made in Holland.

Más información:
Scherjon’s klompenmakerij en klompenmuseum
Dr. Ypeylaan 8
9257 MR Noardburgum
sidebar:ciudad:amsterdam
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Es muy interesante este artículo, es muy bueno saber de otros países sus culturas, a través de este artículo nos podemos dar cuenta la artesanía que ellos tienen, es muy interesante saber que cada país tiene sus artesanías.