Riga, capital de Letonia, está situada en la desembocadura del río Daugava, cerca del mar Báltico. El centro histórico de Riga fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por la gran cantidad de edificios de Arte Nouveau, comparable con Viena, Praga o Barcelona.
Riga era un antiguo establecimiento de los livonianos, que fue fundada en 1201 por el obispo de Livonia. Aunque la ciudad ya había estado creada por mercaderes alemanes en la desembocadura del Daugava en 1158. A partir de ese momento fue uno de los centros comerciales más importantes del mar Báltico. La ciudad se convirtió al luteranismo en 1521, y el pais pasó a formar parte de Polonia, de Suecia, y finalmente en 1710 fue ocupada por los rusos. El 1914 era la tercera ciudad del imperio ruso. En 1918 se independizó de Rusia y se formó la Capital de la República de Letonia. En 1940 la URSS ocupó por la fuerza el pais, y durante el 1941 hasta 1944 fue ocupada por los alemanes, sufriendo graves daños y la aniquilación de la mayoría de su población judía. Desde 1945 hasta 1991 fue capital de la República Socialista Soviética de Letonia, y desde el 1991 es nuevamente un país independiente.
Del centro histórico de Riga destacamos para empezar una ruta en la plaza del fusilero, donde encontrarás la casa de las cabezas negras (Melngaviu nams) y el museo de la ocupación de Letonia. La casa de las cabezas negras era la sede del gremio de mercaderes que fue destruída en 1941, y reconstruída en 2001; actualmente es la oficina de turismo de la ciudad. El museo de la ocupación rusa de Letonia, es un impresionante museo donde se relata la historia de la ocupación del país paralelamente con la Segunda Guerra Mundial, y explica cómo se vivió en el país hasta 1991. El museo es gratuito, y es muy recomendable visitarlo, dado que al ser pequeño e interesante no dejará indiferente a ningún visitante.
Más al centro de la ciudad se encuentra la catedral, y la iglesia de San Pedro, donde subiendo a su alta torre podrás tener una panorámica de la ciudad, además de pasear por las bonitas y coloridas plazas del centro, que en verano se llenan de terrazas para tomar algún refrigerio.
En la ancha avenida de Brividas, se encuentra el espectacular monumento de la Libertad, desde donde se proclamó la independencia de Letonia en 1991. Siempre rodeado por soldados haciendo guardia, es un punto de parada obligatorio para hacer la foto de rigor. También cerca, se encuentra la Ópera de Riga, y algunos restaurantes para comer a buen precio y nada turísticos.
Pasear por la orilla del río también permite ver una bonita vista de la ciudad, con su nuevo y flamante puente que une las dos partes de Riga. En el centro destacan casas medievales como la de las tres hermanas.
Consejos:
- La moneda de Letonia (actualmente) es el Lat, por tanto, deberás cambiar dinero.
- La compañía de vuelos low-cost Baltic Air se ha establecido en el aeropuerto de Riga, por lo tanto, podrás llegar a otras capitales de escandinavia por precios bastante reducidos.
- No te pierdas Tallinn, la capital de Estonia, donde puedes llegar con solo cuatro horas de autobús.
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y hay annecdotas sobre el mundo.