Valladolid cuenta con 40 parques naturales en toda la provincia. El de Riberas de Castronuño es uno de los más importantes por su ubicación y cantidad de especies de animales (sobre todo aves) que tiene. Una visita a este parque no deja indiferente a nadie, así que aconsejamos dedicarle unas horas si estás cerca.
Los parques naturales son una excelente fuente de aventuras para los turistas senderistas. Puedes pasear entre la naturaleza más diversa de nuestro país, respirar aire puro, aprender sobre la fauna y flora autóctona, y son paseos inmejorables para realizar en solitario o en pareja.
El parque de Riberas de Castronuño se encuentra en una situación ideal a la orilla del río Duero, justo antes de la presa de Castronuño. Comprende los términos municipales de Tordesillas, Torrecilla de la Abadesa, Pollos y Castronuño. Se trata de un espacio natural que puede albergar hasta 260 especies de animales diferentes, y es considerado una zona de protección especial de aves, ya que por su ubicación ahí van a parar una gran cantidad de pájaros migratorios.
La casa
El centro principal de la Reserva de Castronuño es el lugar inicial de la visita. Aquí se encuentra la recepción donde empezará tu recorrido y donde puedes programar la visita o el paseo por el parque.
La casa se divide en dos plantas temáticas divididas en secciones que explican, con fotos y zonas interactivas, lo que hay en el parque. Hay una zona especial que te permite ver la fauna del parque cómodamente gracias a múltiples cámaras y teleobjetivos. Sólo tienes que pasar por ahí y contemplar los monitores, siempre bien orientados gracias a los empleados del parque que se preocupan de que el visitante pueda verlo todo.
Por último hay un pequeño cine que proyecta una película de unos 20 minutos, explicando la historia del parque y el porqué es tan importante su existencia.
La Ruta de los Almendros
Una de las rutas que ofrece el parque de Castronuño y que más éxito tiene es la de los Almendros. Se trata de un recorrido de casi 4 Km. que se puede hacer en unas 2 horas. Su dificultad media-baja lo hace ideal para pasear con los niños.
Es una ruta muy bonita que discurre a lo largo de la orilla del río Duero, rodeado de árboles de todo tipo con años de historia. La ruta tiene varias secciones con nombres tan sugerentes como “la senda de los pescadores”, “camino del Teso sombrero”, o “el Puerto”. Cada una de ellas con sus peculiaridades.
Se puede hacer con un guía del parque que te enseña lo que ojos no expertos no pueden ver.
Esta visita ha sido posible gracias a la colaboración de la Oficina de Turismo de Valladolid.
sidebar:ciudad:valladolid