Mi mejor viaje en taxi en Austin, Texas

Debo confirmar que me encantan los taxis, allí donde viajo intento siempre montarme en un taxi para explorarlos e intentar interactuar con sus conductores, entender cuál es su situación, si hay tráfico o no, si se ganan bien la vida, si la ciudad es peligrosa y si engañan a los turistas. Creo que he vivido situaciones divertidas y penosas en taxis, desde un taxi en Marrakech que le dijimos en medio de un atasco que llegábamos muy tarde a coger el tren (y era cierto, quedaban pocos minutos para que saliera) y empezó a conducir por la acera para adelantar a todos los coches, en Vietnam que nos pasaban el teléfono para colarnos hoteles, en Johanesburgo donde no saben nunca llegar a su destino y empiezan a dar vueltas mientras llaman a la central de taxis para que los guíen, los taxistas de Beijing a los que debes enseñar un mapa y muchos no sabían llegar a nuestro hostal o los taxistas de los escarabajos verdes en Ciudad de México que te cuentan todas las veces que les han robado.

Pantallas y altavoces del taxi de Austin, Texas
Pantallas y altavoces del taxi de Austin, Texas

Pero una de las experiencias más espectaculares que viví en un taxi fue en Austin, Texas. Salimos del hotel donde estábamos alojados y vimos una furgoneta taxi con un taxista barbudo y nos montamos en ella. Mi primera impresión fue de alucine! había pantallas, luces de neón y altavoces por todos los rincones del taxi. Y el taxista nos dice que elijamos canción. No entendíamos nada. Entonces vimos que desde una pantalla táctil central aparecían un listado con un montón de canciones. Empezamos a mirar mientras el taxista nos chillaba que debíamos córrer para elegir una canción que había gente fuera en la calle que nos quería ver bailar! Aun entendíamos menos! Seleccionamos una canción de 50cent y el taxi parecía una discoteca móvil con las luces y los subuffers retumbando en el coche. Rápidamente nos dijo que eligiéramos otra canción y así durante los 15 minutos que duró la divertida carrera hasta el restaurante para cenar.

Nosotros cantando en el taxi de Austin
Nosotros cantando en el taxi de Austin

Si vas a viajar a Austin, reserva el The Land Yacht Taxi y lo pasarás genial!

Cuéntanos qué anécdota has tenido viajando en taxi por el mundo.

#taxi#Estados-Unidos#taxis#austin#texas

Publicado por Marc

"Seamos realistas y hagamos lo imposible". El Che Guevara
5 comentarios
  • Marc, ya sabes que mis viajes en taxi suelen ser bastante penosos…lo pierdo absolutamente todo así que últimamente he optado por otros medios de transporte más seguros como el camello jajaja 🙂 good post!

  • Tenemos más anécdotas de autobuses que de taxis, pero bueno…

    En Perú, viajando hacia Machu Picchu por «la puerta trasera»(*), nos juntamos con un francés, un alemán y dos canadienses. En vista de que eramos seis, unimos fuerzas para negociar el último taxi de un viaje de 8 horas. Los taxistas-furgoneteros habían hecho piña y no nos rebajaban. Estamos hablando de un taxi de 15 soles (cuatro euros) por persona. El francés se negaba a viajar si no le bajaban, asi que se alejó de la fila de unos 10 taxis y se fué a una tienda a comprar agua.

    Mientras nosotros intentábamos convencer a los taxistas de que saliéramos ya, en lugar de esperar a más viajeros, oimos que el francés nos llama: «¡Este nos lleva por 13 soles!». Se había ido al final de la fila y le había preguntado al último taxista. Sacamos las mochilas del maletero del primer taxi y nuestro taxista sale corriendo detrás de nosotros «12 soles, 12 soles». Nos damos la vuelta una vez más y oimos al último de la fila que sentencia «10 soles por cabeza». Trato hecho.

    Nos metemos los seis en un coche, cuatro detrás, una delante y otro en el maletero y nuestro taxista se reía. En el maletero iban las mochilas con el alemán y un pollo vivo, todo dando tumbos por una carretera de montaña sin asfaltar y vadeando rios como si fueramos en un Land Rover. En cierto momento recuerdo que atravesamos un puente de madera (de cuatro palos, más bien) que ponía «límite 1500 kg, solo motocicletas y vehículos ligeros». Y todo esto ¡ahorrándonos un eurazo por cabeza!.

    (*) La puerta trasera: http://www.conmochila.com/consejos-para-llegar-a-machu-picchu-de-forma-economica

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *