Silvia: mis viajes en 2011

He esperado a que el año terminara por completo, porque nunca se sabe, pero ahora sí, podemos dar por concluido 2011. Un año que para mí no ha sido el más viajero, después de 12 meses dando tumbos por el mundo, es difícil superarlo, pero he vivido un año en el que he conocido y redescubierto destinos muy distintos unos de otros, y disfrutando en cada caso de viajes diferentes: urbanos, de reencuentro, con amigos, de naturaleza, de aventura…

Preparando las mochilas
Preparando las mochilas

Amsterdam: enero

La siempre vibrante Amsterdam era nuestro regalo de Reyes. Compartimos esta escapada con Marta y Marc. Todos habíamos estado ya anteriormente en la ciudad, así que aprovechamos para vivir el día a día de sus habitantes en un barrio un poco más alejado del centro turístico en un apartamento alquilado a través de Airbnb.

Amsterdam es de esas ciudades perfectas para un fin de semana largo. Pequeña, animada, siempre con un acogedor café donde ponerse a tono con un carrot cake; interesantes museos como el de Van Gogh, que organiza sesiones de dj por la tarde; y restaurantes donde a menudo dan ganas de volver.

Si además luce un poco el sol, los canales, el barrio judío y el pintoresco Barrio Rojo, son un paseo perfecto antes de visitar la Casa de Anna Frank, o el museo de Heinneken para los más cerveceros.

Como en Holanda todo está muy cerca, aprovechamos para una visita de un día a La Haya y asomarnos al mar del Norte, donde el viento siempre sopla implacable, y mucho más en enero.

La Haya (Países Bajos)
La Haya (Países Bajos)

Málaga: abril

Después de unos meses más sedentarios, llegaba la primavera y con ella las ganas de sacudirnos el modorrismo invernal. El blogtrip #Costrasoltrip oganizado por el Patronato nos tentó con Málaga y a pesar de haber vivido allí durante varios años, me apunté al redescubrimiento, porque cuando vivimos en un lugar siempre nos olvidamos de conocerlo.

Espetos de boquerón en Málaga
Espetos de boquerón en Málaga
Vista de Antequera
Vista de Antequera

Estaba segura de que habría sorpresas con un circuito de interior que nos llevó desde la capital de la Costa del Sol hasta Ronda, pasando por la monumental Antequera. El viaje, con un importante peso gastronómico y en compañía de @viajarcondiego, @larabrito @laloliplanet @viajablog fue para mi una primera e interesante cata en materia de blogtrips.

L’Escala (Girona): junio

En San Juan aprovechamos para conocer un poco mejor lo que tenemos cerca y disfrutamos con amigos de unos días en la Costa Brava. Nuestra base de operaciones en La Escala estaba frente al puerto y tenía piscina, así que acabó convirtiéndose en un lugar de visita para otros amigos, con los que descansamos en las playas de la zona y nos dimos algún que otro homenaje a base de arroces y tapas en los restaurantes de la zona.

Calle de Cadaqués
Calle de Cadaqués

Desde L’Escala se pueden visitar las Ruinas de Ampurias (un importante legado romano donde llega la brisa del mar), el escarpado paisaje del Cap de Creus o acercarse hasta Cadaqués, donde se encuentra la casa museo de Dalí y hay centenares de rincones por descubrir.

Singapur e Indonesia: agosto

Para el ‘gran viaje’ de verano habíamos tenido dudas, Colombia, Tanzania… al final, volvimos a decantarnos por el Sudeste Asiático, un sub continente donde si viajas con la mente abierta y dispuesto a relativizar y no estresante, siempre te sorprendes con descubrimientos a la vuelta de la esquina y mucho para disfrutar.

Marina Bay en Singapur
Marina Bay en Singapur
Amanecer en el volcán Bromo en Java
Amanecer en el volcán Bromo en Java
Ruta en bici por el interior de Bali
Ruta en bici por el interior de Bali

Singapur nos servía de trampolín hacia Indonesia, y aunque al principio sólo era eso, una gran ciudad donde pisar tierra firme antes de saltar de isla en isla, fue finalmente uno de los lugares que más nos sorprendió.

Cenando típicas pizzas indonesias en las Islas Gili (con Marc)
Cenando típicas pizzas indonesias en las Islas Gili (con Marc)

En nuestra vuelta al camino con mochila al hombro después de El Pixel Viajero, recorrimos Java y sus sulfurosos volcanes; Bali y sus campos de arroz con interesantes construcciones y vida rural; y las blancas playas de las islas Gili con sus transparentes aguas habitadas por cientos de relajantes tortugas.

Ordesa (Pirineo Aragonés): octubre

Teníamos una asignatura pendiente en el pirineo aragonés, llegar hasta la Cola de Caballo en el Parque Natural de Ordesa. Es un trekking sencillo pero largo, que no habíamos concluido hacía años por no madrugar suficiente, así que esta vez no era primavera, pero el paisaje pirenaico es igual un destino perfecto para respirar profundamente naturaleza y olvidarnos durante unos días del bullicio urbano.

Parque Natural de Ordesa (Pirineo Aragonés)
Parque Natural de Ordesa

Escocia: noviembre

Quizá no sea el destino más popular a las puertas del frío invierno escocés, pero lo cierto es que la ruta por Escocia a principios del mes de noviembre fue una experiencia muy agradable en compañía de una amiga que estaba viviendo durante una temporada en Edimburgo. Gracias a ella, la escapada tenía un punto freak a la búsqueda de castillos de película y dramáticos paisajes en la isla de Skye.

Castillo de Eilean Donan (Los Inmoratales)
Castillo de Eilean Donan (Los Inmoratales)
Castillo de Edimburgo
Castillo de Edimburgo

Las escarpadas colinas escocesas tienen vida propia y una energía que corre sin cesar por sus innumerables cascadas de agua fría y blanca, no recomiendo probar su temperatura en estas fechas.

Sobre Escocia tendré que escribir en 2012, así que me lo apunto en las tareas para empezar el año con la lista de proyectos bien cargada.

Granada: diciembre

Llegaba el puente de diciembre y queríamos cambiar de aires durante unos días, y como nos despertamos a última hora, no era ya tiempo gangas y ofertas, así que apuntamos a Granada, la excusa perfecta para visitar a algunos amigos, tapear y dejarse acariciar por el sol mientras observas la Alhambra desde el Mirador de San Nicolás.

Alhambra desde el Albaicín
Alhambra desde el Albaicín

Todo es relativo y también mientras viajamos, por eso, después de muchos kilómetros, aunque es casi imposible no dejar volar la imaginación antes de un viaje, contener la expectativas es siempre una apuesta segura para dejarse llevar, sin esperar ni más ni menos de lo que nos encontraremos. Con ese estado de ánimo, las sorpresas siempre suelen ser muy positivas.

¡Feliz año 2012 viajero!

Continúa leyendo la serie 'Nuestros viajes'Txemi, mis viajes de 2010Marc: mis viajes de 2012  

#Singapur#granada#Málaga#Costa-del-Sol#Amsterdam#escocia#edimburgo

Publicado por Silvia

Antes viajaba para ver en los demás la parte diferente; ahora viajo para conocer en qué nos parecemos. Javier Reverte. Viajero y escritor
3 comentarios
  • ¡Qué envidia! Menos mal que no ha sido tu año más viajero…
    Yo, tal y como están las cosas, con viajar en 2012 la mitad del año pasado me conformo (Cartagena/Santander/Córdoba/Alicante/Madrid/Barcelona/Avilés)

  • Viajar libera la mente y además es adictivo. Me ha encantado este post, yo tampoco he tenido mi año más viajero, a pesar de ello he hecho: República Dominicana, Alicante, Albacete, Cádiz, Berlín, Lonndres y Amsterdam.

  • Siempre hay que tener nuevos proyectos que conseguir y destinos a los que llegar. Espero que disfrutéis de este 2012 viajando, a veces, los mejores no son los que más lejos están 🙂

Responder a xipi Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *