Escapada a Bélgica

Escapada a Bélgica

48 horas en Bélgica pueden dar para mucho. Visitar hasta 3 ciudades es posible y ninguna locura. Claro que no serán visitas en profundidad, pero uno puede acabar sintiendo que ha saboreado Bruselas, Brujas y Gante con suficiente tiempo si lo dedicamos exclusivamente al “sightseeing”. Esas fueron las ciudades que decidimos visitar ese fin de semana y resultó ser una buena elección.

Al llegar a Bruselas un viernes por la mañana y marchar el domingo por la tarde, esas dos jornadas son para dedicarlas a la capital belga. Se puede dividir la visita a la ciudad en 3 zonas para repartir mejor las horas que tengamos disponibles: el centro histórico, el Barrio Europeo y la zona del célebre Atomium.

El centro de Bruselas es rápido de recorrer pero a la vez está tan lleno de rincones por pararse a ver que hay que dedicarle varias horas. Tomando como punto de partida la Grand Place, una plaza mayor de las más bonitas que puedes ver en Europa, se puede pasear a pie por los alrededores para ir encontrándote con el Manneken Pis, las fachadas cómic como las de Tintín, el museo Magritte, el edificio de la Bolsa… Pero lo mejor del centro de Bruselas es la vida que desprenden sus calles. Para mí, la sorpresa del viaje fueron las terrazas. Las hay a puñados y suelen estar llenas. Claro que he ido en mayo y la temperatura fue muy agradable, pero el ambiente que se genera con las terrazas llenas le aporta mucha alegría a la ciudad. Por la noche también hay mucho ambiente y claro, si te gusta la cerveza entonces ya la opción de salir es inmejorable.

La segunda zona, la del “barrio europeo”, es donde las instituciones europeas tienen su sede, como la Comisión Europea o el Parlamento, que se puede visitar durante la semana. La parte negativa es que al hemiciclo no se puede acceder en fin de semana. Estas visitas acaban el viernes por la mañana (la última es a las 10h) y si solamente estás hasta el domingo ya no lo podrás ver por dentro. En la misma zona, vale la pena dar un paseo por el parque del Cincuentenario hasta llegar al arco del triunfo, de arquitectura imponente. Si dispones de más tiempo, puedes visitar los museos que alberga la semicircunferencia que sale del arco.

El Atomium está más alejado de la zona central de Bruselas, aunque se llega en metro rápidamente. Admirarlo desde abajo es imperativo si estás en la capital belga, aunque se pueden evitar las largas colas para subir al interior de las esferas ya que no vale mucho la pena tener que soportarlas, a menos que uno sea admirador del monumento y de la historia de la exposición universal del 58.

Brujas Bélgica
Brujas

En un día entero se puede visitar Brujas y Gante. ¿Por qué? Porque ambas ciudades están muy bien comunicadas en tren desde Bruselas, porque Brujas no es para tanto y en cambio Gante sorprende y te puedes quedar hasta primera hora de la noche, cuando la ciudad se vuelve más bonita aún con sus edificios iluminados, ya que hay tren hasta Bruselas hasta las 12 de la noche aproximadamente.

Brujas me decepcionó, aunque ya iba avisada. Con fama de ser una ciudad medieval preciosa, no digo que no lo sea, pero la encontré reconvertida en un parque temático para turistas y en centro comercial. Hay que alejarse un poco del centro más turístico y poder pasear por los canales con más tranquilidad, porque yo sentí pena de que una población con tanto encanto y que conserve tan bien sus casas de siglos de antigüedad esté ahora básicamente pensada para el turista. Y es cara. En general, Bélgica no me pareció precisamente un país low cost, pero Brujas es aún menos económica que el resto.

Aún en Flandes, merece la pena hacer otra parada en Gante. Tiene mucho encanto y no está tan explotada para el turismo como Brujas. Es precioso el castillo de los condes de Gante, ubicado en pleno centro histórico y que además se conserva en muy buen estado a pesar de que sus orígenes datan del siglo IX. El paisaje desde el canal que atraviesa el centro de la ciudad es para no poder parar de hacer fotografías. Además, si se te hace de noche querrás hacer el doble, ya que se convierte en un espectáculo de luz que hace más bonitos aún a sus edificios flamencos. Como Brujas, Gante es una ciudad muy bien adaptada al transporte en bicicleta, y en nada tiene que envidiar a Amsterdam en todos sus elementos comunes.

Gante
Gante

Estas ciudades, como decía, no son precisamente baratas, pero están muy bien comunicadas. El billete de tren para ir a Brujas cuesta unos 15€ por persona y la parte positiva es que puedes bajarte en Gante de regreso. Eso sí, utiliza siempre el tren directo. Para moverte en metro por Bruselas, hay tarjetas multiviaje pero como se pueden hacer caminando la mayoría de los itinerarios, quizá vale más la pena comprar billetes sencillos para aquellos lugares a los que sí que haya que acceder en transporte público, como el Atomium. Un billete sencillo cuesta 2,10€.

#Europa#Brujas#bruselas#bélgica#gante

Publicado por Diana Campo

“No se viaja para escapar de la vida. Se viaja para que la vida no se escape”. Cuando Diana leyó esto algo hizo click para siempre. Enamorada del mar y las playas de ensueño, sólo le gusta madrugar cuando está de viaje.
4 comentarios
  • Hola Diana!
    Precisamente el post que publico mañana en mi blog trata de la Grand Place de Bruselas.
    De todas tus propuestas me quedo con Brujas, una ciudad que me enamoró, aunque es cierto que me quedé con ganas de visitar Gante.
    Espero que la próxima ocasión pueda hacerlo! 😉
    Besotes!

    http://www.mybeautrip.com

  • En mi última estancia en Holanda pude escaparme un fin de semana a Brujas y me pasó un poco como a ti, que me dio demasiada sensación de «parque temático». Ha quedado pendiente Gante para la próxima, si ya tenía ganas de ir, ahora aún más.

Responder a Marjorie Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *