El hotel Ostel es una experiencia nostálgica. Situado en el corazón de Berlín, muy cerca de la estación de Ostbahnfof y de la parte de muro que ejerce de testimonio mudo de la división de Alemania, el hotel cultiva con gusto y una pizca de ironia el look de la ex-RDA.
Es un viaje en el tiempo. Si queremos tener referente fílmicos recientes, podemos recordar algunos fotogramas de Goodbye Lenin o La Vida de los otros (Das leben der anderen), y tendremos parte del decorado de este original alojamiento. La ambientación es tal, que hasta hay retratos de Erich Honecker en las paredes, un detalle que incluso puede llegar a irritar, por eso lo de la ironía. Desde luego hay que ir armado de buen humor, aunque ya tiene algunos detractores, que lo consideran una provocación.
La decoración es espectacular, tapicerías de colores con motivos geométricos y un teléfono grande de la época. Muebles de fornica, radios enormes y nada de televisión, ¡es la RDA!
Pero lo mejor de todo es que cuenta con una amplia oferta, que va desde la habitación tipo albergue de juventud con 6 camas, que cuesta 9 euros por persona; a la suite, que vale 59 euros por persona, y 35 euros si optas por el apartamento.
El nombre del hotel deriva del término Ostalgie, fomado por la palabra Ost (este) y Nostalgie (nostalgia). El término alemán se utiliza para referirse a los nostálgicos de la antigua República Democrática Alemana. Por supuesto, su apertura, en la pasada primavera, vino acompañada de polémica entre nostálgicos y víctimas, pero quizá no sea necesario tomar este curioso hotel como un símbolo, sino como un testigo histórico. Aunque cuando se trata de épocas tan recientes, las sensibilidades están justificadas.
Si el aire nostálgico y un poco irreverente de Ostel no nos convence, la oferta de hoteles en Berlín es amplia, desde los presupuestos más ajustados a los mas lujosos.
sidebar:ciudad:berlin
[…] Foto: 3 viajes al día Tags: Berlín, hoteles temáticos Artículos relacionados […]
[…] Vía: 3 Viajes al Día […]
muebles de fornica?